Llegó. Por fin. Undo ha recibido su paquete. Una carta de casi dos kgs de peso llena de mapas, fotografías, poesías, algo de música, esperanza, muchos colores... algún dibujo, color violeta... incluso un par de banderas.
Tarda tres semanas en llegar una carta (si son menos de 2kgs, es carta, entonces va directo. Si pesa más, es paquete, y pierde mucho tiempo en aduana...Es la nueva faceta de este blog: Datos prácticos de como llegar a Isla de Pascua, aunque sea por correo....) desde Zgz hasta Rapa Nui.
... Como ultimamente hablamos por horas, unas 504 horas interminables.
En cambio, hace algo de tiempo que no recibo una. Si interesantes mails, si postales... incluso postales anónimas que me piden un milagro ("organízate")... Recibo música, geniales películas y recibo flores... Recibo interesantes noticias, y mejores ofertas. Recibo alguna revista a la que estoy suscrita, y algún que otro libro que un amigo, de vez en cuando, me remite. Así que no hecho de menos las cartas...
Creo que por fin he encontrado el equilibrio perfecto: Disfruto elaborándolas y no las espero. Tanto así que se me pasan días sin abrir el buzón. Pero en cambio, me cuesta no revisar este otro correo... para leer a Undo, para leer a mis amigos, para enterarme de cursos interesantes que no haré o interesantes puestos de trabajo a los que no puedo postular por no tener la nacionalidad pertinente... Pero siento que si, que he encontrado el equilibrio.
Ahora estaré varios días sin mirar mi correo, y creo que sobreviviré. Me marcho a Murcia y estas concentraciones nunca se sabe lo que a una le deparan... (uso o abuso del tiempo, quiero decir...)
Mientras tanto, os dejo leer vuestros correos; os dejo tiempo para escribir otros..... para releer vuestras mejores epístolas... y sobretodo para recordar cuando fue el momento en el que recibisteis vuestra última carta....
Si ha pasado mucho, mucho tiempo, avisadme. Es preciso solucionarlo.
Un beso. Nos vemos a la vuelta.
Creo que por fin he encontrado el equilibrio perfecto: Disfruto elaborándolas y no las espero. Tanto así que se me pasan días sin abrir el buzón. Pero en cambio, me cuesta no revisar este otro correo... para leer a Undo, para leer a mis amigos, para enterarme de cursos interesantes que no haré o interesantes puestos de trabajo a los que no puedo postular por no tener la nacionalidad pertinente... Pero siento que si, que he encontrado el equilibrio.
Ahora estaré varios días sin mirar mi correo, y creo que sobreviviré. Me marcho a Murcia y estas concentraciones nunca se sabe lo que a una le deparan... (uso o abuso del tiempo, quiero decir...)
Mientras tanto, os dejo leer vuestros correos; os dejo tiempo para escribir otros..... para releer vuestras mejores epístolas... y sobretodo para recordar cuando fue el momento en el que recibisteis vuestra última carta....
Si ha pasado mucho, mucho tiempo, avisadme. Es preciso solucionarlo.
Un beso. Nos vemos a la vuelta.
4 comentarios:
Vueve entera, Tot!
Me preguntaba ayer por esos tres príncipes y su aventura con el camello tuerto y la mujer embarazada por las tierras de Ceilán,cuando alguien,en la televisión,preguntó como se llama todo eso que se hace sin pensar.Intento responderme y suena el teléfono en el despacho de Dicke."Se nos han adelantado"Penzias y Wilson descubren la prueba-reliquia del primer estallido expansivo,toda la materia-energía de este jovencísimo universo se estrenaba con una temperatura(ºk)de 1 seguido de 32 ceros,en medio de un constante y caótico flujo de creación y aniquilación de materia y antimateria.
Un poco antes,unos doscientos años antes de que se oyera en aquella universidad"radiación de fondo",hace algo más de 2millones 207mil horas, el excéntrico Horace Walpole manda una carta a su amigo,el diplomático británico en Italia,Horace Mann,en la que se nombra por primera vez la "serendipidad2 .Desde allí,éste había enviado un retrato de Bianca Capello,que luego se convirtió en Gran Duquesa de Toscana,al casarse con Francesco de Médici.El retrato no tenía marco y Walpole quiso ponerle uno con el escudo de armas de los Capello.En la carta contó a Mann que había tenido mucha suerte cuando,buscando un escudo de los Médici en un libro veneciano de heráldica,encontró el de los Capello.Ya conocía el cuento de los tres príncipes,como yo ayer cuando la pantalla fue adueñada por el rojo mayúscula:
" Háblale a un niño de los principios científicos del funcionamiento de la televisión y lo dejarás tan tranquilo, pero se mostrará absolutamente asombrado ante el hecho que el proceso sea igual para el color rojo que para cualquier otro color. Digo, hombre, es EL ROJO, debe haber alguna cosa especial o distinta, no puede ser que se ponga el color rojo de la misma manera que los otros colores, y el niño se va meneando la cabeza y murmurando algo sobre los adultos que de veras no ven las diferencias de las cosas que realmente importan, como la diferencia del Rojo con respecto a los demas colores..."
Leía esto cuando,al ver el libro a mi derecha,pensé"¡qué suerte!",como si,en ese mismo instante,mi cuerpo sumergiéndose en una cálida bañera,hiciera rebosar otro cuerpo mío pero en forma de agua,exactamente igual que yo.Pensé en las tantas cosas que hay ahí dentro,me sentí dichoso al saber en ese momento lo grandioso que es poder leer.Y pensé que,quizás,la utilidad que yo sentía en esas hojas,y en tantas otras,sólo se podría romper escribiendo,resistiéndose a leer,a alimentarse,casi como en una huelga de hambre.Así que,sin saber cómo,me vi con ese pequeño libro abierto ante mí y,de la misma manera que en la pantalla los ojos se dirigían solos a el ROJO,en las dos hojas abiertas se fueron hacia unas letras en cursiva,no sé en qué orden:"mujer,carta,ventana".El párrafo exacto era:"Mujer sirviendo leche.Mujer con balanza.El collar de perlas.Mujer joven ante la ventana con un jarro.Niña leyendo una carta ante la ventana abierta.
La plenitud e independencia del momento presente."
Y a pesar de la promesa que me hice,leo más atrás:"Ella,tan preñada,tan tranquila en la inmanencia de su maternidad,lee la carta que sacó de la caja sin duda por centésima vez;allí,colgando en la pared a su derecha,un mapa del mundo,el símbolo de todo lo que existe fuera de aquella habitación:aquella luz,una luz tan pálida que raya en el blanco,bañando con delicadeza su cara y brillando sobre su blusa azul,el vientre henchido de vida y el azul bañado en luminosidad.Para seguir con lo mismo:Mujer sirviendo..."
No te das cuenta,pero un poco después sientes que algo está pasando,como si,por un instante,te hubieras convertido en testigo,no sé si promotor,de un diálogo entre los colores de dos relatos bien distintos.Entonces te das cuenta y piensas qué haces leyendo ese libro,si yo estaba en internet.No sabes muy bien qué,pero algo ha pasado ya,como si las letras de colores te estuvieran proponiendo un juego y pudieras oírlas reír al acercar la oreja.Intentas poner sobre la mesa el máximo de atención que tu organismo te permite esa tarde,y vas hacia atrás,donde así continúa el libro comprado el sábado posterior a ese discurso,hacia la hoja de atrás,supongo que porque las cursivas finalizaban un párrafo,aunque los ojos podrían decir mejor por qué,tan veloces y caprichosos.
"Cuando habla de la habitación,no quiere olvidar las ventanas que a veces se encuentran en ella.La habitación no es necesariamente una imagen de la conciencia hermética;´el sabe que cuando un hombre o una mujer están de pie o sentados en una habitación,allí hay algo más que el silencio del pensamiento:el silencio de un cuerpo que lucha por transformar sus pensamientos en palabras.No intenta sugerir que todo lo que ocurre entre las cuatro paredes de la conciencia es sufrimiento,como se desprende de sus alusiones previas a Hölderlin y a Emily Dickinson.Piensa,por ejemplo,en las mujeres de Vermeer,solas en sus habitaciones,con la luz brillante del mundo real entrando a raudales por una ventana abierta o cerrada,y la absoluta inmovilidad de aquellas soledades,una evocación casi desgarradora de la vida cotidiana y de sus inconstancias domésticas.Piensa sobre todo en una pintura que vio en el Rijksmuseum de Amsterdam,"Mujer en azul",y cuya contemplación lo dejó absorto.Tal como escribió un crítico:"La carta,el mapa,el embarazo de la mujer,la silla vacía,la caja abierta y la ventana invisible son todo recordatorios o emblemas naturales de la ausencia,de lo invisible,de otros espíritus,otros anhelos,tiempos y lugares,del pasado y del futuro,del nacimiento y tal vez de la muerte;en resumen,de un mundo que se extiende más allá del marco del cuadro,y de horizontes más grandes y más amplios que abarcan la escena que aparece ante nuestros ojos e interfieren en ella.Y sin embargo Vermeer insiste en la plenitud y la independencia del momento presente,con tal convicción que su capacidad para orientar y contener cobra un valor metafísico."
A saber cuánto cabe en esta pausa,no voy a poder repetirla,pero podría hacer un repaso a las cartas más cercanas,¿acaso hubo una época en que los reyes fueron quienes mejor dominaban el movitiempo?,¿sería todo más aburrido si hiciera las cosas como es debido,si leyera los libros,y los leyera desde el principio?¿está el mundo,esférico,en el cuadro,en el recuadro blanco,en la pantalla,en la hoja?¿cuánto hace que no recibo una carta?¿valen las que no tienen remitente?¿hacia dónde va ese paquete de nuestra editora?¿es lo mismo un viaje que una carta,el movitiempo ha superado al movimiento,y el movimiento a ..?Todo pasa como un pelotón de una carrera ciclista,después de cuyo paso no eres capaz de decir lo que has visto.Sigues leyendo,aunque más bien,siguen pasando las bicis,no sé si la repetición de las que has visto o desde otra posición sin tanto público, a ver si así eres capaz de organizar el tráfico en la cabeza,en el libro,en los recuerdos,en el movimiento en el tiempo,si es que puede haber movimiento fuera de él.
"Pero más que los objetos mencionados en esta lista,es la cualidad de la luz que penetra por la ventana invisible,a la izquierda del espectador,la que con tanto ímpetu lo induce a concentrar su atención en el exterior,en el mundo que está más allá del cuadro.A.mira con fijeza el rostro de la mujer,y a medida que pasa el tiempo,casi le parece escuchar su voz leyendo la carta que tiene en la mano.Ella,tan preñada,tan tranquila..."
Leía,pero probablemente sólo avanzaba palabra tras palabra,yo estaba con las cartas-ni siquiera ahora sé lo que he leído-intentando esconderme para dejarlas a ellas solas,sin molestarlas,pero lo suficientemente cerca para contármelo,y beber.Y beber agua de lluvia de las antípodas.
Estás rodeado,no puedes seguir,pero hay que parar.Es la hora de ir a la tienda Movistar más cercana, a por el duplicado de mi tarjeta desaparecida.Y entonces,dispuesto a salir a la calle,un papel asoma bajo la puerta.Seur informa que mi teléfono,mi nuevo Nokia oscuro está en casa de la vecina,8 días más tarde de lo acordado.Se me hace entrega del paquete de la nueva compañía con un pequeño perro de testigo,al que no tenía el gusto de conocer,salvo la percusión de sus ladridos cuando se queda en casa solo,que también acompañan este acto,como si él tampoco se lo llegase a creer del todo.Están próximas a terminar 108 horas incomunicado,sin que haya pasado absolutamente nada,bueno..mejor no hablar.
Y,efectivamente,nos vemos dada la vuelta,que aunque disfrute llenando de letras este pequeño rectángulo,te aviso que hace mucho,mucho tiempo que no recibo una carta,así que organizaté.
Como quien oye llover,los océanos bailan con todas las cartas del mundo,llenas de flores que se pegan como el velcro.En el centro,una mujer dirige el movimiento,prefiere arrancar la hierba que crece tan rápido a dejar que el agua se lleve a la gente.Tiene buena vista y sabe quien es la reina,una gota de agua en el mar que la rodea,la porción más pequeña arrancada de sus sueños.
Me quito el sombrero,Onomattopéyico,ha sido un viaje,que parece dejarme en un sitio distinto.Ayer tampoco pude superar la adicción a las palabras de otros al comprar"Autobiografías ajenas" de Antonio Tabucchi.Es irresistible,una vez levantada una sola hoja.Su post-prefacio(después,por lo tanto antes) dice así:"...numerosas misivas de lectores y lectoras, a propósito de 'Se está haciendo cada vez más tarde',según los cuales yo he contado su historia,porque se han reconocido en esta o aquella carta.Y hasta ahí,pase.Es inútil que te encomiendes a la llamada autonomía del texto o a ciertas ocurrencias geniales de Gadda:la literatura siempre será un espejo donde reconocerte,si te buscas o,sobre todo,si no te queda otra salida.Pues resulta que un señor,un investigador en el campo de la medicina,me parece,que vive en los Estados Unidos y que asegura haberme conocido en Génova hace veinte años,ha escrito una carta al director de cine Fernando Lopes en la que afirma que su figura(la de él,el médico)fue supuestamente la que me sirvió para el personaje de Spido,aunque haya rebajado su nivel social y profesional.Pero Spido,en realidad,sigue diciendo,soy yo,porque embutí en su piel mi yo mismo de entonces,un hombre de un pesimismo fúnebre,prácticamente nihilista,carente de teorética y,sobre todo,sin ideales ni esperanzas.Sé ya lo que me responderás:y el propietario de la Tabaquería se ha sonreído.De acuerdo,pero a ese señor le diría de buena gana que si Spido soy yo,pero en el fondo se reconoce él,pues bien,no sólo es verdad que cuando escribimos el Yo es otro,como se nos enseña.Es otro también él,por fin,y que no se lo tome demasiado a mal:alguien le ha hecho cambiar de piel,por una vez en la vida.Vida que será todo lo brillante que se quiera,satisfactoria y de primera clase,pero eso no elimina la monotonía.Yo le he hecho viajar en tercera clase,aunque no sea más que unas cuantas páginas,pero gracias a mí ha vivido una experiencia que tal vez no hubiera vivido en toda su vida.En definitiva,una autobiografía ajena,si puedo decirlo así,hecha por un lector mío,que a su manera es una poética a posteriori también,y a la que desde luego no quiero dejar escapar,porque se merece su propio puesto entre estas poéticas mías a posteriori tendencialmente ilógicas,carentes de deontología,cargadas de falsas memorias y falsas voluntades,mensajeras de un sentido que nos esforzamos patéticamente en dar después a algo que ha sucedido antes.Verás:hipótesis vagabundas,nómadas y sobre todo arbitrarias,para las que no es plausible filología alguna.Y que son por encima de todo un pretexto para hablar de libros ajenos.Creo que es el sentido de las páginas que te mando,páginas que tienen el valor que tienen,aparte del que pueda tener la mentira,por voluntaria o involuntaria que sea.Porque la mentira no deja de tener,en cualquier caso,cierta utilidad:sirve para definir los confines de la verdad."
Carta a un amigo.
Y hace mucho también,Tot,que nadie me escribe mentiras ni verdades...
Feliz viaje y muchos besos.
Te están echando de tu blog. Haz Algo.
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