domingo, junio 18, 2006

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EL OLVIDO

en la otra orilla de la noche
el amor es posible

- llévame -

llévame entre las dulces sustancias
que mueren cada día en tu memoria

Alejandra Pizarnik

2 comentarios:

Faramar dijo...

Creo que el olvido llega cuando no lo buscas.
Si las cosas duelen y las quieres olvidar, permanecen. Las heridas por ejemplo, cicatrizan cuando dejas de reparar en ellas... cuando aún sin olvidarlas, las ignoras. Pero para ello, hay que dejar que las cosas se curen al aire, para que no se infecten, y que el sol borre rápido las cicatrices.
Yo no quiero olvidar, ni lo bueno, ni lo malo, porque así nos hemos hecho y nos estamos haciendo.

Martín Romanelli dijo...

No soy nada.
Nunca seré nada.
No puedo querer ser nada.
Aparte de eso, tengo en mí todos los sueños del mundo.

FERNANDO PESSOA, Tabaquería (fragmento)