Definitivamente hoy es un gran día...
Y para la familia de Ingrid, más...
Y para la propia Ingrid, más todavía...
Hoy ya es realidad.
Han liberado a Ingrid Betancourt.
... y eso, eso me hace tremendamente feliz.
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5 comentarios:
Me sumo a tu felicidad. Es fácil empatizar con el infierno que ha debido pasar esta mujer, por tanto, es fácil también empatizar con la merecidísima alegría que debe estar viviendo en estos momentos. Es una alegría contagiosa, no hay más que ver la expresión de su cara y la de los suyos.
Felicidad multiplicada por 15, el número total de rehenes que fueron liberados en el rescate, algunos de los cuales llevaban más de diez años en manos de las FARC.
Pues eso, Tot, que estoy contigo en que hoy es un día muy feliz. Mira por dónde, en respuesta a uno de tus recientes post, se me ocurre que éste sería un perfecto motivo para un brindis. Pues venga, levantemos la copa y...¡por los días bonitos! ¡por los finales felices! ¡por la libertad!
brindo con vosotras
y otro más...
cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día,cien días y un día.
Hoy es un día feliz, sin duda, aunque la buena noticia me lleve a reflexionar sobre lo que puede llevar a un ser humano a secuestrar, maltratar, asesinar, etc. a otro. El otro día veía en antena 3 una serie sobre el secuestro de Miguel Angel Blanco y se me revolvía el estómago pensando en todos los pensa-mientos que algunas personas elaboran para justificar la violencia, para ocultar lo que me imagino debe ser una insoportable inseguridad, tan insoportable que les lleva a hacer (o justificar) barbaridades semejantes.
En un siglo en el que las palabras son escuchadas (aunque es cierto que el poder maneja medios de comunicación y nos enseña "su" verdad y eso es otro tipo de violencia) el terrorismo no tiene sentido (que dudo que lo tenga en cualquier sentido pero bueno) y aquellos que lo utilizan supongo que es porque no tienen palabra y tratan de compensar sus carencias con violencia. Cuando el cortex, el cerebro racional, no puede se dispara el sistema limbico, el cerebro mamifero, en una reacción de ataque o huida que por definicion siempre indica que existe un miedo, equivalente en intensidad al nivel de violencia expresado.
No muy lejos de nosotros existen personas amenazadas, que no pueden vivir su día a día con la seguridad con la que otros lo hacemos, hacía ellas yo levanto mi copa en ese brindis que propone Cristina, especialmente a las que ponen la libertad por encima incluso de su seguridad personal. Para ellos/as mi admiración y respeto, para los que los amenazan mi compasión, deben sentir de verdad mucho miedo...
cualquier ausencia de libertad es triste pero qué habrá detrás de todo esto que no sepamos...vuelvo a leerte que son vacaciones!!!!
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