TRAZAS DEL AMOR

Tiene el amor trazas de bastón...

Te sustenta. Te sujeta. Te sirve de apoyo. Hace que no te caigas. Te ayuda a mantener el equilibrio. Hace que te canses menos. Te completa, o te complementa.
Si estás cojo, coja, te permite continuar con la vida tranquilamente... haciendo que esa limitación "temporal" pase lo más silenciosa posible... Si no estás cojo, coja, te permite llegar a los mismos sitios a los que hubieras llegado sin bastón... pero mucho menos cansado, cansada...

Tiene el amor trazas de tirita... además, ahora hay tiritas supermodernas que además de proteger la herida te la curan.

Te protege. Te cuida. Te cura. Te cubre. Hace las funciones de piel (tan importantes....) allí donde la perdiste por un roce, o por una quemadura... Te cobija la herida. Te permite continuar adelante a pesar de la molestia...

Tiene el amor trazas de viaje en barco...

Te marea. Te fascina. No siempre sabes donde vas. Es divertido... pero al mismo tiempo es algo serio. Sabes que te lleva a algún sitio, aunque (repito) no siempre lo conozcas. Te calma. Tiene riesgos. Te mece. Es romántico. Te hace sentir minúsculo ante la magnitud del mar, y del cielo.

Te lleva lejos. O te hunde.

(nota: post inspirado por el dolor de mi pie izquierdo (con rozaduras y torcedura....), los viajes en tren que poco tiene que ver con el amor (exceptuando esos trenes que se pierden y que se van...) la canción de Radiohead y por este cuadro de mi admirado Odilon Redon)