Reflexionar es a veces un gran ejercicio... y no solo mental, ya que cuantas veces uno se levanta con fuerza inusitada después de un repaso de las cosas que no salieron como uno quiso... Reconozco que ante tal reflexión, uno a veces se queda bloqueado, sentado... pero son mas las veces que la acción de reflexionar termina en una constructiva reacción...
Con esto de terminar el año me resulta inevitable hacer un repaso de lo que han sido los pasados doce meses... y como dijimos al comenzar... ha habido de todo...
Hoy estoy en condiciones de reconocer que no ha sido un año fácil. No ha sido malo, ni mucho menos... pero si algo siento que caracteriza al año de abandonamos (mejor dicho nos abandona él.. nosotros somos los que seguimos aquí...) ha sido el esfuerzo. No ha sido una de esas temporadas en tu vida en las que todo parece fluir... He conseguido cosas interesantes, he realizado cosas alucinantes... pero todo como con mucho esfuerzo. Empecé el año con el corazón descolocadísimo y eso me condicionó a que todo lo que tuviera que ver con esa víscera me supusiera, al menos los diez primeros meses del año, mucho esfuerzo... Tanto que casi caigo en el error de conformarme con historias para mi no convenientes...
El trabajo es otro tema... soy de las privilegiadas que tienen un trabajo que les apasiona, y este año he tenido mucho... pero el de Madrid ha supuesto un esfuerzo tremendo... y ha sido, realmente, agotador...
Pero ha habido mas... Abundan las cosas apasionantes, ya que como decía, ha sido todo muy intenso, y los casi dos meses que viajé por Japón y el sudeste asiático me han colmado de cosas increíbles... pero el 2007 quedará siempre teñido por la pérdida de un buen amigo, de una persona fabulosa... La marcha de Eduardo nos deja, a todos lo que tuvimos la gran suerte de conocerle, incompletos, con una marca en el alma que nos recuerda que somos los protagonistas de un cuento con finales... con muchos finales posibles, pero con final..
En realidad este año ha habido mas pérdidas.... pero diferentes... Los hay que no mueren y se van para siempre y los que marchan para siempre pero quedan con nosotros.. en nosotros.. Es lo de siempre, en definitiva...
Nosotros seguimos siendo protagonistas pero los personas secundarios, rotan... algunos se convierten en protagonistas y otros en extras... Hay extras que pasan a ser protagonistas... o personajes nuevos que pasan, directos, al lugar más central del escenario...
En realidad... eso son los años... una escena más de la gran obra teatral que es la vida...
Con esto de terminar el año me resulta inevitable hacer un repaso de lo que han sido los pasados doce meses... y como dijimos al comenzar... ha habido de todo...
Hoy estoy en condiciones de reconocer que no ha sido un año fácil. No ha sido malo, ni mucho menos... pero si algo siento que caracteriza al año de abandonamos (mejor dicho nos abandona él.. nosotros somos los que seguimos aquí...) ha sido el esfuerzo. No ha sido una de esas temporadas en tu vida en las que todo parece fluir... He conseguido cosas interesantes, he realizado cosas alucinantes... pero todo como con mucho esfuerzo. Empecé el año con el corazón descolocadísimo y eso me condicionó a que todo lo que tuviera que ver con esa víscera me supusiera, al menos los diez primeros meses del año, mucho esfuerzo... Tanto que casi caigo en el error de conformarme con historias para mi no convenientes...
El trabajo es otro tema... soy de las privilegiadas que tienen un trabajo que les apasiona, y este año he tenido mucho... pero el de Madrid ha supuesto un esfuerzo tremendo... y ha sido, realmente, agotador...
Pero ha habido mas... Abundan las cosas apasionantes, ya que como decía, ha sido todo muy intenso, y los casi dos meses que viajé por Japón y el sudeste asiático me han colmado de cosas increíbles... pero el 2007 quedará siempre teñido por la pérdida de un buen amigo, de una persona fabulosa... La marcha de Eduardo nos deja, a todos lo que tuvimos la gran suerte de conocerle, incompletos, con una marca en el alma que nos recuerda que somos los protagonistas de un cuento con finales... con muchos finales posibles, pero con final..
En realidad este año ha habido mas pérdidas.... pero diferentes... Los hay que no mueren y se van para siempre y los que marchan para siempre pero quedan con nosotros.. en nosotros.. Es lo de siempre, en definitiva...
Nosotros seguimos siendo protagonistas pero los personas secundarios, rotan... algunos se convierten en protagonistas y otros en extras... Hay extras que pasan a ser protagonistas... o personajes nuevos que pasan, directos, al lugar más central del escenario...
En realidad... eso son los años... una escena más de la gran obra teatral que es la vida...
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