Decía Shakespeare que Ocurra lo que ocurra, aún en el día más borrascoso las horas y el tiempo pasan... y así es. A veces para bien, y a veces para mal... Y sin duda eso es lo más terrorífico de todo, que la vida sigue, y nosotros en ella, con ella, con la obligación moral de llenar esos días de vida, de pequeñas ilusiones que se van tornando, por ellas mismas, en inmensas... Con la obligación de cambiar la tristeza en sonrisa, a veces mas o menos espontánea, que los que nos rodean merecen recibir.
... Es que estamos aquí.
Y en esto venía pensando yo días atrás... en lo irónico del cuento este, que es la vida, del que somos marionetas... pero marionetas de cristal, o en su defecto, de cerámica... tan frágiles como los pétalos de una flor, que al acariciar corremos el riesgo de rasgar... pero al fin y al cabo, de quienes mas necesitamos rodearnos es de personitas como ellas, de aquellos que saben que somos de cristal, de los que saben, aunque a veces nos traten como si fuéramos de hierro, que somos frágiles y vulnerables.. que a veces necesitamos el silencio. O necesitamos un abrazo. O tan solo necesitamos llorar.
Ocurra lo que ocurra, aún en el día más borrascoso las horas y el tiempo pasan... y continuamente debemos aprender a vivir con quienes nos faltan... abriendo el telón para dejar paso a las nuevas marionetas que son los nuevos personajes de esta rueda de la vida que no para, rotundamente nunca, de girar...
5 comentarios:
Bonita o terrible reflexión... no me decido. Supongo que tiene ambos ingredientes, como la vida misma.
Adelante Tot. Sigue haciéndolo como hasta ahora, celebrando la vida a cada instante. No se te da nada mal vivir, y mejor se te da hacernos sentir vivos a los demás.
Sí,es terrible estar aquí.Pero están las marionetas.Y los hilos.Y los titiriteros.El cielo oscuro hace crecer cataratas de vida en el tiempo.Veremos cómo se abren las nubes en una flor,en el mismo lugar por el que volvemos a pasar tantas veces.Todo mientras las estrellas dan vueltas.Todo a uno y otro lado del telón,delante y encima de este pequeño escenario en el que viajamos.
No cesaremos de hacer exploraciones
Y al final de todas nuestras exploraciones
Habremos llegado al punto en que comenzamos
Y veremos el lugar por vez primera...
Una condición de simplicidad completa
(Cuyo costo lo es todo)
Y todo estará bien
Cuando las lenguas de fuego se plieguen
Sobre sí mismas en un nudo de fuego coronado
Y el fuego y la rosa se confundan en uno
De T.S.Eliot
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