Ha sido un abril loco que ha terminado, como no podía ser de otra manera... en mayo...
En un mayo que presenta trazas de cordura y responsabilidad...
En un Mayo que culminará con nuestro segundo cumpleaños (¿solo dos años, si parece una eternidad de tiempo todo lo que ha pasado en este tiempo?.... uff....) y para el que aun quedan muchos días vírgenes llenos de sucesos impredecibles... No tengo ninguna duda...
Pero si, ha sido un abril loco. Un abril normal que se volvió loco con la visita de Undo... Un abril con día de libro, con nuevas historias abiertas sobre el tapete como si fueran las cartas del tarot. Un abril loco que culminó con tristísimos aniversarios, con despedidas en aeropuertos llenos de colores amarillos, y nuevos descubrimientos literarios... Un abril lleno de exposiciones (Picasso, Modigliani, Peter Blake...), un abril fotografiado y un abril irrepetible.
El otro día, para asimilarlo, paseaba por Barcelona.... Una es de fácil sorprender, y siempre encuentra, siente, escucha, huele... algo que le despierta memorias colectivas que no sabe de donde le vienen... y así escuché una frase que nadie pronunció, si no que estaba escrita: La belleza es tu cabeza...
A la primera solo la observé. A la segunda la observé y me detuve... Para observarla mejor. A la tercera me detuve. La Observé, y me escuché... A la cuarta, la fotografié... para tenerla cerca...
La Belleza es tu cabeza. ES. Cuando la ví, además, salía del cine. De ver una película en la que el protagonista repite eso de que la belleza está en los ojos de quien mira. Pero aquello decía ES. No está en... ni vive en... No. La belleza es tu cabeza.
Y la cabeza es donde justificas lo que sientes.
Donde racionalizas lo que no puede comprenderse...
Donde guardamos la memoria.
Lo que sientes. Lo que no comprendes: La memoria...
Todo eso es belleza.
Todo eso eres tu...
Porque tu, si, tu, eres belleza...
Y es que la belleza no está. La belleza no viene (así no puede irse...).
La belleza, simplemente, sencillamente... ES...
En un mayo que presenta trazas de cordura y responsabilidad...
En un Mayo que culminará con nuestro segundo cumpleaños (¿solo dos años, si parece una eternidad de tiempo todo lo que ha pasado en este tiempo?.... uff....) y para el que aun quedan muchos días vírgenes llenos de sucesos impredecibles... No tengo ninguna duda...
Pero si, ha sido un abril loco. Un abril normal que se volvió loco con la visita de Undo... Un abril con día de libro, con nuevas historias abiertas sobre el tapete como si fueran las cartas del tarot. Un abril loco que culminó con tristísimos aniversarios, con despedidas en aeropuertos llenos de colores amarillos, y nuevos descubrimientos literarios... Un abril lleno de exposiciones (Picasso, Modigliani, Peter Blake...), un abril fotografiado y un abril irrepetible.
El otro día, para asimilarlo, paseaba por Barcelona.... Una es de fácil sorprender, y siempre encuentra, siente, escucha, huele... algo que le despierta memorias colectivas que no sabe de donde le vienen... y así escuché una frase que nadie pronunció, si no que estaba escrita: La belleza es tu cabeza...
A la primera solo la observé. A la segunda la observé y me detuve... Para observarla mejor. A la tercera me detuve. La Observé, y me escuché... A la cuarta, la fotografié... para tenerla cerca...
La Belleza es tu cabeza. ES. Cuando la ví, además, salía del cine. De ver una película en la que el protagonista repite eso de que la belleza está en los ojos de quien mira. Pero aquello decía ES. No está en... ni vive en... No. La belleza es tu cabeza.
Y la cabeza es donde justificas lo que sientes.
Donde racionalizas lo que no puede comprenderse...
Donde guardamos la memoria.
Lo que sientes. Lo que no comprendes: La memoria...
Todo eso es belleza.
Todo eso eres tu...
Porque tu, si, tu, eres belleza...
Y es que la belleza no está. La belleza no viene (así no puede irse...).
La belleza, simplemente, sencillamente... ES...
1 comentario:
ja!
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