Aniversario... Día en que se cumplen años de algún suceso... así que hoy, celebramos el Nuestro... Y digo el Nuestro porque nuestro es... Ni mío, ni tuyo, que pasas por aquí con cierta asiduidad: Nuestro... ya que gracias a ti, se mantiene... ( y muchas veces, se contiene....)
Y mira por donde que ha pasado un año. Un año en el que nos ha dado tiempo a hablar de libros, de varios libros... y de mucho sentimiento, me parece... No te has perdido en la ambivalencia de mis palabras. Y si lo has hecho, has sabido sacar lo que te correspondía... Te has emocionado alguna vez, como con el reencuentro con una fotografía del 35, o con las pérdidas.... has disfrutado de los encuentros casuales (que no han sido pocos...) y de un viaje a las Antípodas.... Has paseado por Isla de Pascua. Te has recorrido la península todas las semanas, aunque eso quizás no lo sepas. Te has enamorado y te has quedado, otra vez, solo/a... Has debatido si calzar zapatos de plomo o si era mejor volar... Has viajado en avión y te has hecho un tatuaje (o quizás más...). Me has acompañado cuando dejé mi rutina aquí, y te viniste, conmigo, a Madrid. Has sido testigo de las veces que he perdido la voz (con mis afonías o con una racha de silencio necesaria...),y te alegraste cuando recuperé el orden en mi vida. Has compartido mis desvelos, y has estado ahí cuando la sorpresa me ha pillado por sorpresa.... Vimos caer a hombres del cielo y a mujeres casarse con serpientes... Hemos escuchado música. Y has visto muchos cuadros de Magritte, de Georgia O´Keefe, de Van Gogh, de Monet, de Hopper y de tantos otros... Me has regalado silencios, aunque siempre he sabido que estabas por aquí.
Los hay que han encontrado bajo la etiqueta "anónimo" un traje invisible que parece encajarles... pero como también he sido "invisible", quiero invitarles a que, alguna vez, se muestren...
Hemos hablado de laberintos, físicos y existenciales.... y no hemos perdido a nadie. Habéis sido testigo de cómo casi me entrego a falsos amores, pero cómo, al final, he podido reaccionar a tiempo. Hemos cambiado juntos de sistema operativo... y de un ordenador negro a uno blanco. Hemos hablado de perros. De Auster y de Murakami.
Hemos ido al Pirineo, de celebraciones, y de concentración... Ha habido de todo, pero siempre hemos sabido sacar lo mejor de cada asunto...
Todavía me quedan cosas que decir... y la vida, se encargará del resto...
La que nos espera, amigos...
Gracias...